Renta de cabañas vacacionales en Puerto Vallarta

Una casa muy amplia y ordenada, muy cómoda para descansar y muy fácil de encontrar

Bonito lugar, para relajarte, pasa un río a pie de la cabaña y se escucha muy relajante todo.

Nos encantó la cabaña, Lala es una anfitriona increíble! Volveremos sin duda.

Una experianci muy agradable. Don Juan y Doña Estela son unas personas tan lindas y atentas que ayuda en todo. Sin duda regresaremos pronto.

Encontré que la cabaña estaba muy limpia y cómoda. Tenía todo lo que necesitaba en la cocina. La silla de hamaca era un lugar muy cómodo para tomar café por la mañana. El aire acondicionado y el ventilador de techo enfriaron el lugar rápidamente. Dormí bien en la cama con muchos pájaros diferentes en el árbol de enfrente. Los vecinos eran agradables.

Todo en orden, buena ubicación, cercana a restaurantes y playa principal.

La estancia en la cabaña fue excelente, la vista hacia el mar estuvo genial, para llegar hacia la cabaña son un buen de escalones, así que la recomendación es tener muy buena condición física para subir, pero de ahí en más, todo estuvo perfecto. Excelente opción la cabaña de Pedro.

El alojamiento es encantador como se describe, ideal para aislarse y descansar. Alan y Vanessa fueron muy atentos. El acceso por lancha depende del clima, y el muelle de llegada está en muy mal estado. Alan muy al pendiente de nuestra llegada, nos tuvo que mandar lancha privada a Yelapa, tuvimos que pagar el doble ($300 por persona). El tapanco donde está la cama queda al nivel del suelo junto al camino, lo que puede incomodar si buscas privacidad, tiene un techo inclinado que dificulta subir o bajar, hay que espabilarse bien en la noche antes de bajar al baño. Tampoco se puede dejar comida fuera del refrigerador, ya que animales accedieron incluso a un anaquel alto. La playa es pequeña, con piedras, con boyas a 30 m, no apta para nadar, es más bien para disfrutar de la vista, vimos ballenas muy cerca! no hay atardeceres visibles ni mucho sol en el alojamiento. Desde el camino y otro alojamiento se ve el área donde pega el sol así que no hay mucha privacidad.

Las cabañitas de Olga y su familia son hermosas. En un lugar rodeado de mar y vegetación te sientes alejado de todo. Las noches escuchando el mar son super lindas. Ella y su familia son personas increíbles que se aseguran de que tengas todo lo que necesitas para tu estadía. Lo único que se debe tomar en cuenta y que no está claro al momento de reservar es que las cabañas se encuentran en lo alto del cerro y no es posible llegar ahí a menos que tengas una camioneta alta y 4x4. Cosas a considerar (que me hubiera gustado saber al momento de reservar): -Después de pasar Pto. Vallarta son como 2 horas de carretera de terracería con baches, subidas y bajadas algo complicadas. -Llegas a Chimo y si tu vehículo no es 4x4, Olga y su familia resguardan tu coche en su casa y te llevan al hospedaje en sus camionetas. -La playa que se encuentra abajo de las cabañas tiene muchas piedras grandes y es complicado entrar a nadar, pero está libre de gentíos y es un gran lugar para pasar el día.

Excelente vista, excelente lugar, excelente comida, muy necesaria una camioneta para llegar al hotel

Es un paraíso selvático. También es el trabajo de la vida del anfitrión. Se muestra. La habitación tiene hermosas vistas a la selva a través del pequeño valle hacia las montañas al otro lado del camino. La habitación en sí es muy moderna, pero conserva el encanto de Yelala de la vieja escuela con viento al aire libre y espectáculo al aire libre. IThe pool es una obra de arte. El paisaje es hermoso e impecable. No lo dudes.

Excelente lugar para disfrutar de una buena compañía, muy buena ubicación, el lugar muy bonito y tranquilo

Wow, Yelapa es un sueño. Al llegar aquí, inmediatamente te sientes como si hubieras encontrado tu propio pequeño paraíso junto a la playa. Anita y su familia fueron muy acogedores y receptivos y nos sentimos como en casa. Notaré que si eres un durmiente sensible, TRAE TAPONES PARA LOS OÍDOS, ya que la casa está justo en la carretera y los vehículos todoterreno comienzan a navegar bastante temprano por la mañana. Definitivamente no estaba cerca de un factor decisivo para nosotros, sino algo a tener en cuenta.

Honestamente, una de las estancias más únicas y privadas que hemos tenido. El lugar era inmaculado y hermoso y abierto al mar. Fue increíble. Teníamos todas las playas circundantes para nosotros durante toda nuestra estancia. ¡El anfitrión nos ayudó a organizar el transporte y los comestibles adicionales para nosotros! Definitivamente para los aventureros. Saltar de un barco a las olas a la llegada, subir y bajar por el terreno hasta las playas (no más de 10 minutos). A menos de una hora de caminata a la ciudad, donde los comestibles típicos son escasos (así que trae lo que necesites). Gran restaurante en la ciudad y lugareños muy amables. Prepárate para algunas tarifas adicionales. Pagamos 200 pesos en taxi desde PV, 400 pesos al taxi acuático de Boca a Chonchos, propina de 500 pesos al final de la estancia, otros 500 para un viaje en burro a Chimo para coger el barco de vuelta. Los lugareños cobran otros 100 solo por enviarte al taxi y luego pagas la misma cantidad para volver al continente. ¡Volvería a pagar todo por esta increíble experiencia! ¡visita obligada!

cerca de la playa y del centro.